26 junio 2006

Nada que perder

No Direction Home/Martin Scorsese
La cara de Bob Dylan no aparece en ningún billete. La cara de Bob Dylan es la del compinche de Kris Kristofferson en "Pat Garret & Billy The Kid". Entonces, ¿quién es este viejito que habla hasta por los codos en un documental? ¿Una versión masculina y avejentada de Regina Spektor, con una armónica en vez de un piano y ninguna infancia en Moscú? Ya que me pregunto, me respondo que Dylan no tiene cara, no tiene cuerpo, no tiene raza, no tiene religión. El fue quien dijo "When you got nothing, you got nothing to lose". Por eso mismo, no tiene voz, no tiene música, no tiene edad, no tiene tos. Tampoco tendría pasado, sino fuera porque escribió algunas de las mejores páginas de la historia del rock. De ese pasado habla este viejito en la pantalla, porque sabe que el pasado nunca será su propiedad privada. El pasado, simplemente, pasó.

No hay comentarios.:

¿Chat?

Lejos de la cercanía

Lejos de la cercanía
“Cuando vivís es extraño todo lo que sucede”, dice el amigo Martín Toledo en su novela “Proximidad”. Martín, el que cayó aquella noche de 2004 desde el escenario de Casa Babylon. El que regresó a la superficie con los puños llenos de literatura. Llanto de Mudo fue la editorial que recogió esa furia y la convirtió en un libro. Más de 160 páginas en las que se cronica un fracaso tras otro. Porque, ya lo señala el propio autor, “cuando se quiere ser feliz comienzan las equivocaciones”. Y allá vamos entonces, cayéndonos y levantándonos, durmiéndonos y despertándonos. Cada vez más lejos y cada vez más cerca de la felicidad.

EL FANZINE

EL FANZINE