¿Qué tal una panquequera en el cineclub? No habrá copiosos escupitajos, ni quedará el tendal de jeringas, ni nada que se le parezca. "The Filth And The Fury" es el provocador epitafio de los Sex Pistols, dirigido por Julien Temple en 2000, que se exhibe en el comienzo de un ciclo de películas sobre el punk. Testimonio directo de una de las gestas culturales más revulsivas del siglo XX. En la pantalla aparecen cinco magníficos jóvenes disparados hacia ningún lugar por un tan ambicioso como intrépido mánager. Cuatro de ellos llegarán a destino, el quinto no. El quinto caerá en un lugar común, la muerte. La epopeya de esta banda de rock tiene aquí más acción que "Excalibur". A la salida, con las luces prendidas, veo de todo. Desde oficinistas hasta chicos encrestados. Chicos que repiten el gesto de Sid. Sid Vicious. El único de los cinco que no sabe que entró en el Hall de la Fama del Rock.
19 marzo 2007
Panqueques
¿Qué tal una panquequera en el cineclub? No habrá copiosos escupitajos, ni quedará el tendal de jeringas, ni nada que se le parezca. "The Filth And The Fury" es el provocador epitafio de los Sex Pistols, dirigido por Julien Temple en 2000, que se exhibe en el comienzo de un ciclo de películas sobre el punk. Testimonio directo de una de las gestas culturales más revulsivas del siglo XX. En la pantalla aparecen cinco magníficos jóvenes disparados hacia ningún lugar por un tan ambicioso como intrépido mánager. Cuatro de ellos llegarán a destino, el quinto no. El quinto caerá en un lugar común, la muerte. La epopeya de esta banda de rock tiene aquí más acción que "Excalibur". A la salida, con las luces prendidas, veo de todo. Desde oficinistas hasta chicos encrestados. Chicos que repiten el gesto de Sid. Sid Vicious. El único de los cinco que no sabe que entró en el Hall de la Fama del Rock.
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Lejos de la cercanía
“Cuando vivís es extraño todo lo que sucede”, dice el amigo Martín Toledo en su novela “Proximidad”. Martín, el que cayó aquella noche de 2004 desde el escenario de Casa Babylon. El que regresó a la superficie con los puños llenos de literatura. Llanto de Mudo fue la editorial que recogió esa furia y la convirtió en un libro. Más de 160 páginas en las que se cronica un fracaso tras otro. Porque, ya lo señala el propio autor, “cuando se quiere ser feliz comienzan las equivocaciones”. Y allá vamos entonces, cayéndonos y levantándonos, durmiéndonos y despertándonos. Cada vez más lejos y cada vez más cerca de la felicidad.
EL FANZINE
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